Lecciones de Carteras 60/40 en Estados Unidos
No está claro qué es lo que hace el paso del tiempo más veloz y llevadero: si la uniformidad, o la variedad y el parcelamiento; en cualquier caso, se trata de hacer pasar el tiempo con una estrategia clara para los ahorros e inversiones, que pugne por la tranquilidad, pero a la vez, también, por la rentabilidad.
En España hemos visto que sólo importa, para la inmensa mayoría, la seguridad del dinero en el banco sin remunerar. Son alérgicos a cualquier decisión que incorpore riesgo de poder perder capital. Al cabo, el asunto de la remuneración de los ahorros está sujeto a grandes arbitrariedades; es poco más o menos como la cultura financiera existente entre la población, el conocimiento de profesionales en asesoramiento con experiencia y relaciones duraderas, la actividad comercial de la banca y las compañías de seguros e incluso, el tratamiento fiscal, aunque al final, se trata de confianza: confianza en el sistema y confianza en los profesionales.
En Estados Unidos, con una gran cultura financiera, por necesidad, porque no están acostumbrados que el Estado se ocupe de cubrir todas sus necesidades, la cartera clásica de los últimos 50 años ha sido 60% en acciones y 40% en bonos. La correlación históricamente negativa había permitido rentabilidades promedio del 5% anual. La explicación general de consenso dice que, en épocas de crecimiento las empresas ganan dinero, los tipos de interés son bajos, el coste de financiación igualmente, lo que permite obtener plusvalías con la subida de las acciones. En cambio, cuando es época de recesión, la política monetaria expansiva permite la bajada de tipos de interés, con el objetivo de ayudar a la demanda a crecer, y los bonos ganan dinero.
¿ Qué está pasando ahora en Estados Unidos? que esas carteras 60/40 pierden dinero. El matrimonio Dave and Kathy Lindenstruth, con más de 50 años de matrimonio y también millones de americanos, como muy bien explica The Wall Stret Journal perdieron el año pasado un 17% de promedio en sus carteras de ahorro e inversión. Es el peor comportamiento de esa composición de carteras desde el año 1937. ¿Por qué? obvio que es por la caída tanto de las acciones como de los bonos y con resultados desastrosos. Es un momento complicado y con cambios de paradigmas objeto de estudio y análisis para tomar decisiones informadas.
🤞 Recuerda, la tranquilidad financiera no es un destino, es un camino.
El actuario y economista Jaume Quibus es DEA de economía financiera y contabilidad, Licenciado en Ciencias Actuariales y Financieras , Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Barcelona y PDD en IESE-Universidad de Navarra. Miembro titular de las siguientes asociaciones: Instituto de Actuarios Españoles, Col·legi d´Actuaris de Catalunya, Col·legi d'economistes de Catalunya, International Actuarial Association, Associació Catalana de Comptabilidad i Direcció y también del Alumni de IESE. Socio fundador en 1998 de la sociedad profesional actuarial Quibus, miembro titular con el número 6 de sociedades en el Col.legi d'Actuaris de Catalunya.