Pasó hace menos de 6 meses en UK con la crisis de los fondos de pensiones y ha vuelto a pasar en los Estados Unidos y sus bancos regionales. Entonces, el rendimiento del Bono inglés a 10 años alcanzó su máximo el 10 de octubre 2022 al 4,47%. Recordemos que fue un error de gestión de riesgos por no saber ver que las pérdidas por la venta de deuda son cóncava con respecto a la subida del rendimiento y no proporcional. Una vez más la intervención de su banco central dando crédito suficiente, consiguió estabilizar inicialmente los tipos del bono a 10 años, y con el tiempo el rendimiento ha ido bajando hasta situarse en el 3,36%. En septiembre 2022 la inflación interanual era del 10,10% y en febrero 2023 del 10,40%.
Lo mismo ha pasado con la retirada de depósitos en los bancos más vulnerables de los Estados Unidos. La retirada de depósitos por trimestres del año 2022 fue una figura dócil y creciente con la política monetaria restrictiva de la FED, hasta que en el primer trimestre del año 2023 su importe duplicó el importe total del año anterior. Otra vez la concavidad que no había sido estudiada ni anticipada ha provocado una nueva intervención, en este caso, de la FED para facilitar financiación suficiente al sector en cuantías astronómicas. En 15 días, se ha revertido dos terceras partes de todo lo alcanzado en casi un año. El balance de la FED vuelve a ser de 8,73 trillones americanos de dólares, siendo su máximo 8,97 trillones. La tasa de inflación en USA a febrero es del 6% y no se puede esperar ninguna mejora, aunque sus autoridades monetarias logran ver rápidamente la posible solución a sus problemas.
Aprender a ver es dirigir los ojos con calma, con paciencia, dejar venir las cosas, suspender el juicio, girar en torno del caso particular por todos lados y aprender a comprender en su totalidad. Todo lo contrario que la actuación de las autoridades monetarias de los Estados Unidos. Están perdidos en su lucha contra la inflación. Antes, pensaban que, con la subida de tipos, conseguirían controlarla. Ahora, su presidente, quiere decir con su mensaje que deberán esperar y ver si las turbulencias del sector bancario deprimen el crédito de las entidades a particulares y empresas, cae la contratación de trabajadores y en consecuencia la inflación remite mágicamente por esa nueva “lógica”.
He llegado a leer en la prensa económica que la FED había colocado las quiebras bancarias en su conjunto de herramientas para frenar la demanda (Fuente WSJ). Más seriedad, por favor. Jamás un banco de la naturaleza del SVB debiera haber sido conocido en todos los rincones de la tierra, si la FED hubiera realizado correctamente su trabajo de supervisión. Desconocimiento de las retribuciones de sus administradores que sus sueldos estaban gratificados con importes bonificaciones vinculados a la rentabilidad de sus recursos propios (Fuente FT). Concentración de riesgos en un tipo muy concreto de clientes startups y empresas tecnológicas. Falta de petición de un plan de resolución por parte de la FED al banco con anterioridad a la retirada masiva de depósitos. Someter a test de estrés al SVC antes de que la situación de crisis escalara (Fuente Expansión). Resumiendo: otra vez graves errores de gestión de riesgos que se debían haber evitado.
El actuario y economista Jaume Quibus es DEA de economía financiera y contabilidad, Licenciado en Ciencias Actuariales y Financieras , Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Barcelona y PDD en IESE-Universidad de Navarra. Miembro titular de las siguientes asociaciones: Instituto de Actuarios Españoles, Col·legi d´Actuaris de Catalunya, Col·legi d'economistes de Catalunya, International Actuarial Association, Associació Catalana de Comptabilidad i Direcció y también del Alumni de IESE. Socio fundador en 1998 de la sociedad profesional actuarial Quibus, miembro titular con el número 6 de sociedades en el Col.legi d'Actuaris de Catalunya.